Aumenta el riesgo de picada de mosca del olivo
El estado fenológico dominante del cultivo en estos momentos en la mayoría de las provincias olivareras continúa siendo “H” (endurecimiento de hueso), aumentando el porcentaje de parcelas que han alcanzado “l1” (Envero-amarilleo) y como más avanzado el estado “l2” (Envero-manchas rojas), según explican desde la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF).
Escasa presencia de la mosca del olivo
La incidencia que presenta la mosca del olivo en el olivar andaluz durante la primera decena de julio es, según la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIF) muy escasa, mostrando una mayor presencia en las provincias de Cádiz y Sevilla, en donde, por las condiciones atmosféricas de alta humedad relativa y temperaturas algo más suaves, se favorece la biología del insecto. Se observan frutos afectados por la mosca del olivo en todas las provincias, excepto en Granada y Jaén, mientras que en las provincias de Cádiz, Córdoba y Sevilla ya existen frutos con puesta viable.
La mosca del olivo tuvo una destacada incidencia la campaña 2018/2019
La Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía (RAIE) ha lanzado el boletín fitosanitario de la campaña 2018/2019. En dicho documento, según recoge la Oleorevista, se analiza el estado actual de las principales plagas que afectan al aceite. La mosca del olivo hizo acto de presencia a primeros de junio, con las primeras capturas registradas en algunas provincias como Cádiz y Sevilla. Las altas temperaturas del verano favorecieron su aparición. Su incidencia, en términos generales, ha sido superior la campaña 2018/2019 que la anterior. Cádiz ha sido una provincia especialmente afectada por este agente, con un 24,32% de picada total. Le siguen Jaén y Huelva con un 14,95% y un 13,18%. Málaga y Sevilla, en cambio, pueden presumir de sus bajos registros (solo el 4,81% y el 4,27%, respectivamente).
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