Hoy, como todos los días, queremos informar a nuestros socios de un desagradable asunto que nos tiene en vilo: los incendios forestales que se han registrado estos últimos días en la provincia.
El de La Puerta de Segura parece estar controlado, según las últimas informaciones de los organismos oficiales.
Pero en el caso del incendio de Quesada, Huesa y Larva, la situación es crítica. La última medida aprobada esta mañana por laConsejería de Medio Ambiente (el consejero José Fiscal se ha desplazado a la zona) es la de crear un contrafuego de más de 100 metros de anchura en el flanco sureste del incendio para frenar su avance. Ésta medida consiste en quemar de forma controlada una con la previsión de que cuando llegue el fuego, pueda apagarse porque el terreno ya está quemado. Es una técnica muy arriesgada, según ha explicado el propio consejero a la agencia Europa Press, pero lo harán los expertos a la vista de que el incendio no puede apagarse aún.
En cuanto a la superficie quemada, se estima, según el Gobierno central, que sean muchas más de las 2.000 hectáreas de las que se hablaba ayer.
Aunque afortunadamente no ha habido daños humanos, se han desalojado de forma preventiva a una treintena de residentes en la aldea de Ceal (Huesa) y de Cortijos nuevos y Chillal.
En el incendio (medios aéreos), pero el aire, la escasa humedad y las elevadas temperaturas están complicando su extinción.
El incendio se desató el pasado domingo, según las primeras hipótesis causado por un rayo. El martes, se dio por extinguido, pero más tarde se reavivó arrasando gran parte de la dehesa de Quesada y Huesa.
