ASAJA-Jaén recuerda al profesional del campo que, desde el mes de febrero de 1996, todo agricultor, empresario o autónomo agrícola que contrate trabajadores en las tareas del campo debe contar con un Plan de Prevención de Riesgos Laborales que cumpla con todos los requisitos incluidos en la Ley 31/1995 (modificada posteriormente por la ley 54/2003). Las obligaciones principales del empresario prescritas en dicha Ley son:
- Disponer de un plan de Prevención, para integrarlo en la gestión normal de las actividades empresariales.
- Evaluar continuamente los riesgos no evitables que afecten al trabajador, generados por los equipos, máquinas, productos y procesos de cada puesto y tarea.
- Planificar y ejecutar las medidas de prevención y protección de conformidad con la evaluación de riesgos, entre las que deben incluirse la formación y la vigilancia de la salud de los trabajadores.
No cumplir con estas obligaciones, es decir, no proporcionar a los trabajadores una forma segura de trabajar, está sancionado con multas que van desde 1.500 euros a 600.000 euros, además de las responsabilidades civiles que dependerán de las consecuencias del accidente, el recargo y pago de prestaciones de la Seguridad Social por incapacidad temporal, invalidez o muerte y las responsabilidades penales, con penas privativas de libertad.
El control de estas actuaciones se realiza por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, que viene actuando en el sector agrario al igual que en otros sectores con altos índices de accidentalidad.
Cuando se produce un accidente grave, debe notificarse a este organismo para su investigación y posible atribución de responsabilidades. En estos casos también investigará el Centro Provincial de Prevención de Riesgos Laborales.
Para dar solución a este problema, ASAJA-Jaén pone a disposición de sus socios el convenio con ERGOS CONSULTORES, empresa acreditada en prevención de riesgos laborales por la Junta de Andalucía y especializada en el sector agrícola. La prestación de sus servicios, mediante el desplazamiento de los técnicos a los centros de trabajo, aportan la eficacia y garantía necesaria en esta materia.