De agricultor a agricultor (Artículo de opinión de Miguel Del Moral)

ASAJA

De agricultor a agricultor

miguel del moralEn los últimos días, con la proximidad de unas nuevas elecciones estamos viendo como nuestros políticos utilizan las ayudas de la PAC como arma política para ganar nuestros votos. Nos dicen que hemos perdido dinero de la PAC. Y yo les digo ¿y qué han hecho ustedes para evitarlo? Nada. Porque les interesa este juego de ayudas y subvenciones que manipulan a su antojo. Ahora “SÍ” hay dinero, ahora “NO” hay dinero… Y sobre todo en lo que se refiere a las ayudas del segundo pilar de la PAC de primera instalación de jóvenes a la empresa agraria. Cada vez les gusta más hablar de jóvenes a todo el mundo, pero solo “de boquilla” porque a la hora de la verdad, todo queda en nada. Es algo que cada vez me preocupa más, porque no solo hacen uso de las subvenciones para tener más crédito político, si no que nos utilizan y nos intentan llevar como un rebaño de ovejas hacia una opinión política u otra.

                                                                                                                                                                               Miguel del Moral             

Y es que somos el eslabón más débil de la cadena. ¿Por qué? Porque nosotros lo queremos. Debemos de olvidar los viejos individualismos para luchar por una mayor y mejor integración y organización de los productores, orientada hacia el MERCADO. Porque en realidad los agricultores no queremos una PAC, si no que nuestros productos valgan un precio justo, rentable, y tengan PRECIO. Pero es que nosotros también tenemos nuestra parte de culpa. No podemos siempre echar balones fuera. Y pongo como ejemplo nuestro sector, el aceite de oliva.

Una vez más los agricultores olivareros volvemos a temblar de los nervios por el temor al desplome de precios del aceite de oliva. Y es que las lluvias de los últimos días parecen mermar la que se preveía una nefasta cosecha 2016/17. Aunque sea pronto para poder hablar con certeza, no podemos negar que la situación ha mejorado.

Dicho esto, no debemos de olvidar algunos datos muy importantes sobre el mercado del aceite de oliva. Las salidas de aceite en España en los primeros meses de campaña superan las 108.000t mensuales de media a un precio superior a los 3€, las del pasado mes de abril 120.000t, el segundo mejor dato conocido para este mes, lo que demuestra que ES POSIBLE vender nuestro aceite a un precio rentable y justo para los agricultores jieneneses. Solo depende de nosotros vender más barato. Si vendemos nuestros aceites más baratos y bajamos los precios, sólo será porque nosotros queremos, los lineales tardarán meses en repercutir esos precios, y lo único que conseguiremos será que nosotros, los agricultores perdamos dinero para que se lo lleve el resto de la cadena.

Esta falta de unión en la concertación de precios no es sólo por culpa de los demás, debemos hacer AUTOCRÍTICA y mirar lo que hacemos los agricultores en nuestras cooperativas. Debemos implicarnos más, hacernos participes de todas las decisiones con todas las consecuencias, formarnos e informarnos lo mejor posible, y tomar decisiones. Hace tan solo unas semanas veíamos a los agricultores franceses parar nuestros camiones cisterna cargados de nuestro vino y tirarlo por las carreteras, porque producimos más barato que ellos. Ahora nos entra aceite de Marruecos, de Túnez, nos amplían el contingente de 56.000t a 35.000t más… Y nosotros nos quedamos como si nada. Y mejor que no hablemos de cómo está el jornal en esos países!! O de los productos fitosanitarios que usan, muchos prohibidos en la UE!! Pues aun así, seguimos vendiendo a muy buen precio en cantidades bastantes importantes como el pasado mes de abril.
En los tres primeros meses de esta campaña las importaciones Extra UE han aumentado un 30% respecto al mismo periodo del año anterior, a la vez que aumenta el consumo dentro y fuera de la UE. El COI (Consejo Oleícola Internacional) prevé que el consumo aumente este año un +4´6%.
Por lo que tenemos motivos más que suficientes para implicarnos más, tener una opinión común y hacer un esfuerzo conjunto. Al final todo depende nosotros. Las cifras y los datos son los que son, y no debemos dejar de recordar que el aceite de oliva es un producto que fuera de nuestras fronteras se considera como un alimento de lujo, que lo es, aunque no terminemos de creérnoslo, por miles de razones y principalmente por los numerosos beneficios para la salud. Día sí y día no, tenemos estudios que lo demuestran. El consumo mundial del aceite de oliva no para de aumentar en todo el mundo. En los últimos 25 años el consumo mundial del aceite de oliva se ha multiplicado por dos. Es un alimento de lujo porque es escaso y año tras año se vende todo lo producimos. Y es que no sabemos lo que tenemos…

Para terminar quisiera hacer una reflexión sobre nosotros los agricultores. Estos últimos años los políticos Europeos, españoles y andaluces, en mi opinión han conseguido hacer de algunos agricultores, que no todos, unos agricultores algo “conformistas” una generación de agricultores que se está envejeciendo, y que han sido los que han conseguido sacar adelante nuestras actuales explotaciones agrarias vendiendo sus productos, unos años a mejor y otros peor, pero a un precio razonable saliendo adelante dignamente. Han contribuido con su esfuerzo a crear esta sociedad de bienestar en la que vivimos hoy día, a fuerza de trabajar y trabajar como los que más!! Y es que antes se podía vivir con la venta de nuestros productos, y hoy ya NO… En los últimos 10-20 años hemos visto una evolución y transformación abismal en el mundo en general y en la agricultura en particular. Por todo ello, esta generación de agricultores vivimos asombrados al ver que lo que producimos “no vale”, no tiene precio, y que nos tienen que pagar para compensar nuestros ingresos, porque con la venta de nuestros productos no es suficiente como para garantizar nuestra renta. Pero esa no es la solución. La solución está en los MERCADOS, y me repito, en que nuestros productos deben tener PRECIO, y para ello debemos esforzarnos, darle un valor añadido a nuestros productos, diferenciarlos de los demás y venderlos a un precio justo que garantice nuestros ingresos. También dando paso a nuevas generaciones de agricultores, jóvenes con talento, y con ganas de trabajar. Porque debemos estar orgullosos de nuestra tierra, de lo que producimos y defenderla como lo hicieron otras generaciones. Pienso que este será nuestro principal reto y objetivo a corto plazo en los próximos años. Podemos seguir sin hacer nada, o podemos ponernos manos a la obra y empezar a cambiar las cosas.

Miguel del Moral, presidente de ASAJA Joven de Jaén

Compartir en

Enviar un Comentario