Estudios recientes destacan el importante papel de los patrones dietéticos en la prevención de la enfermedad renal crónica (ERC). Basándose en los datos del Biobanco del Reino Unido, dos estudios prospectivos a gran escala examinaron el vínculo entre la calidad de la dieta y la incidencia de la ERC. Ambos estudios descubrieron que seguir dietas saludables, como la dieta mediterránea rica en aceite de oliva y las dietas basadas en plantas, reducía notablemente el riesgo de desarrollar ERC.
Un estudio realizado con más de 207 000 personas reveló que un mayor seguimiento de la dieta mediterránea se asociaba a un menor riesgo de ERC. En el segundo estudio, los investigadores evaluaron los patrones dietéticos utilizando la puntuación de la Dieta Mediterránea Alternativa (aMED), la puntuación de los Enfoques Dietéticos para Detener la Hipertensión (DASH) y el Índice de Dieta Saludable Basada en Plantas (hPDI) entre más de 106 000 participantes durante un seguimiento medio de 9,27 años. Descubrieron que la adherencia a la dieta mediterránea, la dieta DASH y las dietas saludables basadas en plantas se asociaban con un menor riesgo de ERC, mientras que las dietas poco saludables basadas en plantas y proinflamatorias estaban vinculadas a un mayor riesgo. Estos hallazgos enfatizan el papel protector de las dietas ricas en frutas, verduras, cereales integrales y grasas saludables, en particular el aceite de oliva, en el apoyo a la salud renal.