Nueva norma de calidad para los aceites vegetales comestibles

El Gobierno ha aprobado una nueva norma de calidad para los aceites vegetales comestibles, que sustituye a la reglamentación técnico-sanitaria vigente desde 1983. Se trata de una actualización del marco normativo para adaptarlo a las necesidades actuales de la industria y a las demandas del consumidor. Una de las principales novedades es la ampliación de materias primas autorizadas para la elaboración de aceites vegetales. Hasta ahora, solo podían producirse en España aceites refinados de ocho semillas o frutos (soja, girasol, cacahuete, algodón, germen de maíz, colza, cártamo y pepita de uva). Con la nueva norma, se autoriza el uso de cualquier fruto o semilla permitido para uso alimentario en la Unión Europea, como por ejemplo el aguacate o la nuez. Esta medida busca mejorar la competitividad del sector nacional respecto a otros países comunitarios.


También se regula la producción y comercialización de aceites obtenidos mediante procedimientos mecánicos, los denominados “aceites de presión”, que destacan por conservar mejor el aroma y sabor natural del fruto. La normativa mantiene la protección de la denominación “virgen” y “virgen extra”, reservada exclusivamente para los aceites de oliva. Asimismo, se prohíben las mezclas de aceites vegetales con aceites de oliva.

En materia de etiquetado, se exigirá que se identifique claramente si el producto es un aceite de presión o un aceite refinado. También deberá indicarse si algún componente de una mezcla ha sido refinado, y se permitirán menciones voluntarias como “alto oleico” o “medio oleico”, si corresponde. La norma incorpora nuevos métodos de análisis para reforzar el control frente a posibles fraudes, garantizar la autenticidad de los productos y ofrecer mayor transparencia al consumidor.

Compartir en

Enviar un Comentario