El pasado 25 de mayo se presentó en la ciudad de Barcelona de forma oficial la iniciativa Paralelo 40-Observatorio Mundial de la Dieta Mediterránea, un nuevo proyecto multidisciplinar a escala mundial de seguimiento y difusión de la Dieta Mediterránea, entre cuyos productos se encuentra el acete de oliva, como el estilo de vida más equilibrado y sostenible para las personas y el planeta.
El objetivo de esta iniciativa es promover la investigación interdisciplinar y multisectorial de la Dieta Mediterránea para crear sinergias entre el ámbito científico y las industrias alimentarias. En una primera fase su labor se centrará en la recopilación, interpretación y difusión de información sobre la Dieta Mediterránea y los países que forman el paralelo 40, caracterizados todos ellos por unas condiciones medioambientales y climáticas similares.
Este proyecto, promovido por la Fundación Dieta Mediterránea, está liderado por un grupo de prestigiosos investigadores y científicos internacionales, dirigidos por el doctor Ramón Estruch, coordinador científico de la Fundación Dieta Mediterránea.
Además, Paralelo 40 se convierte en una herramienta de salvaguarda de la Dieta Mediterránea como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la Unesco. Este observatorio revaloriza la Dieta Mediterránea como uno de los estilos de vida más saludables del mundo, una de las mejores soluciones alimentarias y óptimo estilo de vida para luchar contra la pérdida de los hábitos de vida saludables que afecta a los países mediterráneos y que conlleva a una pérdida de calidad de vida y un incremento en la incidencia de enfermedades crónicas como las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, la obesidad, el deterioro cognitivo e incluso el cáncer.
De ser así, también habrá un retorno económico, una mayor sostenibilidad del planeta, una población más sana, y una mayor preservación del patrimonio de todos, tal y como manifestó Fernando Burgaz, director general de e la Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
